¿Es la infidelidad algo genético e inevitable?



El estudio realizado por el Instituto sueco de Karolinska, en Estocolmo concluyó que dos de cada cinco varones tienen esta variación genética, la cual influye también en que existan problemas de convivencia en el matrimonio. La culpa de la infidelidad de los hombres se debe al gen llamado alelo 334, que gestiona la vasopresina, una hormona que se reproduce naturalmente, por ejemplo, con los orgasmos. (...)
El País / España / EFE, vía ElEspectador.com


Es fácil culpar a la genética pero lo cierto es que la infidelidad es algo completamente evitable: te sacan la vuelta una vez, lo dejas y santo remedio. Si le sacó la vuelta a su esposa o pareja oficial para estar con otra, la probabilidad de que lo haga otra vez o que lo haga con la nueva pareja para estar con otra tiende al 100%.   Alelo 334 presente o no, lo cierto es que cuando un hombre no puede mantener una relación estable con su pareja y siente la irresistible necesidad de tener otras "sucursales", tienes que tomar la decisión de si quieres convertir eso en una relación abierta para no tomarse en serio, o si mejor cortas por lo sano y lo desapareces de tu vida.

Hay hombres que por más que dicen estar enamorados de su pareja (y sufren mucho con las separaciones), no dudan ni cinco minutos en conseguirse una segunda, tercera, cuarta y cuantas los recursos (económicos y de engaño) les permitan. A veces tienen cuidado de no dejar pistas, a veces su descuido los traiciona.  Es casi como si quisieran que los descubran, como si se confiaran demasiado en que eso es algo "normal".  Las llevan a las reuniones con amigos, algunos hasta las presentan con sus familias, y unos cuantos avezados incluso les prometen matrimonio y cuando los presionan se escudan en cosas como "es que mi ex-esposa no me quiere dar el divorcio".  Patrañas, lo más probable es que la ex-mujer les haya descubierto infidelidades y sean las primeras en querer firmar el divorcio.

Lo triste es que dependiendo cómo traten su familia y amigos el tema, muchas veces terminan convirtiéndose en cómplices involuntarios de la situación.  Personalmente no permito que mis amigos traigan a las reuniones a las "trampas", si salen conmigo salen con la "firme" o solos.  Y sí, eso explica por qué varios andan desaparecidos.  Y las familias suelen actuar igual ("¡¡mientras vivas bajo mi techo no me vas a traer esas chicas acá!!"), aunque en algunos casos el silencio es cómplice de hijos engreídos.  La falta de respeto a su familia y su entorno es terrible, pero sólo para los que lo permiten. Es común que entre hombres se tapen sus "canas al aire" y que las esposas o parejas oficiales no toleren el engaño (aunque también funciona al revés).

Ojo que el asunto no es exclusivo del género masculino, la mujer también puede tener esa tendencia a no ser fiel, teniendo una pareja "oficial" y a la vez "calentando" a otros, algunas veces sólo por llamar la atención pero otras llegando a tener relaciones con otros, aunque es sabido que a la hora de tener un amante la mujer es mucho más cuidadosa (si se hace algo, hay que hacerlo bien) y es mucho menos probable que alguien se entere del hecho.  Habrá que ver si eso también viene por genética o por presión de la sociedad, esperemos que los científicos sigan investigando al respecto.

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